martes, 23 de abril de 2024

Las lluvias de Semana Santa, la basura y los bienes

 

1.

Unos dicen, con tristeza, que con las lluvias de Semana Santa no van a salir las procesiones.

Otros dicen que es más triste que esas mismas lluvias vayan a causar estragos en la cosecha de cerezas, debido a que los árboles están en plena floración.

Por su parte, los turistas circulan por las vías habilitadas para el ocio, hasta que una voz interior les dice que estarían mejor en cualquier bar.


2.

Este lunes estaba la gente contenta en el pueblo. El fin de semana había estado cargado de acontecimientos, desde una convención de coches clásicos hasta un espectáculo de lucha de vetones contra romanos.

Incuso las calles estaban preciosas con todos los contenedores y las papeleras petadas a reventar, lo que hacía que el personal se frotara las manos, como si fuese la basura y no la nieve la señal inequívoca de que el año sería de bienes.


viernes, 19 de abril de 2024

Ese Calvino enganchado al púlpito


Está ese Calvino enganchado al púlpito y no hay manera de que te deje subir un rato a echar un poco de sermón. Aunque solo sea para decir que sí, que bueno, que la Santísima Trinidad serán tres pero muerden como uno, y que la predestinación será todo lo doble que tú quieras, pero puede que Dios no haya oído hablar de ella.

En cualquier caso, practiquemos la tolerancia en general y la buena convivencia en particular, aunque ello nos aleje del auténtico Dios verdadero.

En realidad, todos tenemos una manera tan especial de convertirnos en polvo que, de seguro, nos abre las puertas del cielo.

jueves, 28 de marzo de 2024

Decían que había un yacimiento de tierras raras

 

Decían que había un yacimiento de tierras raras en la zona, y era cierto. 

Durante tres años, ocho meses y seis días, la extracción fue como la seda, y al día siguiente, de golpe, el yacimiento se agotó.

Era cierto que había tierras raras, pero, ¿cuántas tierras raras debe haber para seguir siendo raras? Ahora lo sabemos: tres años, ocho meses y seis días.

Después de ese periodo ya no quedaban tierras raras, solo una tierra muy rara.


jueves, 21 de marzo de 2024

Niño Laguartiguachi, niño Omikoyo

 

Al niño Lagartiguachi le regalaron muchos muñecos de flaymobil, pero, entre unas cosas y otras, 48 años después, no logra encontrar ninguno.

Al niño Omikoyo solo le regalaron un muñeco tallado en madera y, 58 años después, ahí sigue de llavero.

(Algún retoque ha tenido que hacer al muñeco en estos años. De hecho, del original solo queda la pierna izquierda, la cola de dragón y la sonrisa de hiena. Pero, a pesar de los retoques, sigue siendo el muñeco original, el mismo muñeco más la caricia del tiempo.)

jueves, 14 de marzo de 2024

Distintas maneras de adorar a Dios

 

Los  Pigimeos vivían en una selva impenetrable y, quizás por eso, adoraban a una figurilla tallada en madera a la que llamaban Yo-yo, y le dirigían una plegaria que empezaba así:

¡Oh, gran Yo-yo, tírate el rollo!,

porque la selva es muy grande

y nosotros muy pequeños.

Los Khanlai vivían en los espacios abiertos de las grandes praderas y, quizás por eso, adoraban a Kho-yo, mirando directamente al descomunal cielo, y le dirigían una plegaria que empezaba así:

¡Oh gran Kho-yo, tírate el rollo!,

porque la pradera es muy grande 

y nosotros muy pequeños.

Los Urbesitas viven en grandes ciudades donde por todo tienen que pagar y, quizás por eso, adoran a una cifra a la que llaman Chollo, y le dirigen una plegaria que empieza así:

¡Oh, gran Chollo, tírate todo el rollo!, 

porque la ciudad es muy grande

y yo soy muy pequeño.



jueves, 7 de marzo de 2024

Donde antes había vida, ahora solo queda capital

 

Donde antes había una huerta cultivada al natural, ahora hay un supermercado gestionado de manera comercial. Y ahí justo, donde han puesto una caja de patatas de las que traen de no sé dónde, había una planta de patatas que daba dos cajas.

Donde ahora hay una pesa electrónica enchufada a una empresa del IBEX, antes había una romana que hacía el servicio sin necesidad de conexión.

Donde ahora hay cajas de cartón vacías, palets y envoltorios plásticos, antes había un montón de compost muy del gusto de las lombrices.

Donde antes había un rosal precioso, ahora hay un póster de un campeón de mundo que nos invita a aprovechar la oferta de tres yogures mangobongo al precio de tres y medio.

Donde antes había vida, ahora solo queda capital.

jueves, 29 de febrero de 2024

Las chubarbas del jabalí



Me quejo, es decir, un amigo mío se queja de que los jabalíes le entran en lo suyo, haciéndole daño donde más le duele.

Pero, ¡mira por dónde!, ni mi amigo ni yo nos cortamos de entrar en el bosque a coger setas, como si también fuera lo nuestro.

lunes, 5 de febrero de 2024

La solución a la sequía

 

La solución a la sequía siempre ha sido la misma en todas partes y durante los siglos de los siglos: plantar árboles y valorarlos como una más de la familia. Incluso la ciencia lo dice claramente: las nubes siguen el camino que les marcan los árboles.

Además, la tecnología no puede sacar agua de donde no la hay, por muy tecnología que sea. Es decir, puedes desalar agua de mar, pero, entonces, te quedas sin mar propiamente dicho. El lenguaje popular llama a esta manera de proceder desvestir a un santo para vestir a un fulano que pasaba por allí.

La solución a la sequía que propone una sociedad donde el valor fundamental es el económico solo puede ser económico: gastarse la pasta en apañar griferías, entubados, transporte del líquido elemento, etc. De hecho, vamos a llegar a un punto en el que el teflón escasee en las tiendas como en su día escaseó el papel de comunión en los tiempos del Bicho 19.

Obviamente, para aquel que no pueda pagarlo no es ninguna solución, y aquellos que puedan pagarlo podrán aguantar más tiempo.

Algunos dirán que con la sequía la buena gente se dará cuenta del valor del agua, y otros contestarán que con la sequía esa misma buena gente se dará cuenta del precio del agua.

Ahí lo dejo, me tengo que ir a por agua antes de que den las ocho de la mañana y la cola en la fuente llegue hasta la casa de Vicente.

jueves, 1 de febrero de 2024

Todos los mandamases estaban reunidos

Todos los mandamases de esta parte del mundo estaban reunidos para  celebrar el tanticuanti aniversario de la Declaración Universal de los Derechos del Hombre. 

Luego, al acabar la movida, siguieron haciendo negocios como siempre con todos los mandamases de la otra parte del mundo, que, por lo visto, también tienen sus propias Declaraciones.

Son dos tipos de declaraciones y una sola mesa donde se reparten el turrón.


jueves, 25 de enero de 2024

La complejidad y la robotecnia

 

Cuando atisbas 

la complejidad de la vida en la tierra,

creer en extraterrestres, el cielo

o el infierno no parece tan difícil.


Incluso llegas a creer que un robot

es tu mejor amigo, 

tan solo con que te siga el rollo.